Sandobx Regulatorio, una innovación para los nuevos sistemas de movilidad aérea urbana
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Sandobx Regulatorio, una innovación para los nuevos sistemas de movilidad aérea urbana

Sandobx Regulatorio, una innovación para los nuevos sistemas de movilidad aérea urbana

Ellas vuelan Alto organizó un interesante encuentro sobre Sandbox regulatorio, un nuevo concepto de legislación que, básicamente, consiste en  desarrollar nuevas normativas, para sectores de alta innovación y disruptores, con agilidad y eficiencia,  que en el caso del sector aeronáutico se relaciona directamente con los nuevos sistemas de movilidad aérea sostenible o el News Space.

¿Qué es un sandbox regulatorio? ¿Para qué sirve esta nueva forma de legislar?¿En qué se diferencia del desarrollo de las normativas tradicionales? A todas estas preguntas dio respuesta el nuevo encuentro realizado por Ellas Vuelan Alto, en el ICAM, con la presencia de  Teresa Bonet, abogada del Estado en el Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana; Marta Barón. jefa de gabinete de la Secretaria General de Innovación del Ministerio de Ciencia e Innovación; Mª Francisca Patilla, coordinadora de Centros de Excelencia AESA; Amparo Brea, directora de Innovación, Sostenibilidad y Experiencia Cliente en Aena y Yolanda Bustos, profesora titular de Derecho Civil y Directora GI “Responsabilidad Civil” de la Universidad de Alicante.

La apertura del evento corrió a cargo de Silvia Vela, directora Legal y de Red de Redes de Ellas Vuelan Alto, mientras que Bárbara Trincado, directora Financiera de EVA,  actuó como moderadora del evento.

Elisa González, presidenta de AEDAE, como anfitriona del evento en el ICAM, dio la bienvenida a todas las participantes y al público asistente.

María Rueda, directora ejecutiva de CAA International, brazo independiente de cooperación técnica de la Autoridad de Aviación Civil del Reino Unido, que presta asesoramiento y formación a otros organismos internacionales interesados en mejorar sus prácticas y regulaciones,  fue la encargada de realizar el cierre de la jornada.

Rueda hizo una interesante reflexión sobre la forma en que el Reino Unido ha sido pionero en el establecimiento de sandbox regulatorios, para permitir la innovación en el sector, con convocatorias y un modelo de colaboración público privada que ayuda a las empresas disruptoras a poner en marcha sus proyectos sin que la legislación sea una barrera qyuew añada problemas a la entrada en servicio de los mismos.

Por su parte Marta Cejuela, socia colaboradora de Ellas Vuelan Alto, fue la encargada de resumir las principales conclusiones de un evento que contó con una asistencia presencial record, al ser el primero celebrado por Ellas Vuelan Alto sin restricciones COVID.

LA LEGISLACIÓN QUE AYUDA A INNOVAR

Entre ellas destacó el esquema de “ley protocolo”, prevista en el proyecto de la nueva  Ley de Movilidad, que supone un gran avance porque va a permitir establecer mediante un protocolo entre las empresas (promotores) con participantes (los futuros usuarios de dicha tecnología) realizar pruebas de concepto en un entorno controlado acordado con la autoridad supervisora dentro de los denominados  “Sandbox”. Esa caja de arena o “arenero” donde se le deja al niño jugar reduciendo el riesgo por estar controlado y sus padres le otorgan una cierta flexibilidad para que se desarrolle y experimente.  De la misma forma que un niño gana experiencia en el arenero, con esta fórmula la sociedad, industria y administración va a poder testar la tecnología y aprender con un régimen de garantías para mejorar tanto la tecnología, así como la creación, adaptación o mejora de la regulación existente.

Es por ello que los centros de excelencia son clave para crear “Sandbox”, ya que en ellos trabajan de manera coordinada las entidades públicas y privadas, con proyectos de investigación, desarrollo e innovación, siempre cumpliendo y manteniendo los requisitos de seguridad, para que en un corto o medio plazo todos los proyectos lleguen a implementarse. De ahí que este protocolo de ley les va aportar la posibilidad de poder testar estos proyectos de desarrollo con una garantía jurídica detrás.

En el momento actual que nos encontramos en el sector de la aviación, va a ser de gran ayuda para desarrollar la sostenibilidad, por ejemplos empresas que desarrollen combustibles sostenibles sean los promotores, siendo los participantes por ejemplo los fabricantes de las aeronaves. Para desarrollar la nueva movilidad aérea, con varios potenciales “sandbox”, el U-Space donde se probarán las nuevas infraestructuras (aeropuertos, vertipuertos), la integración de los operadores de los nuevos aerotaxis (tripulados o no), los drones con sus diferentes aplicaciones, así como los nuevos servicios del trafico aéreo. Por eso un Operador/Fabricantes puede ser a su vez promotor en un sandbox para probar su tecnología, como los nuevos VTOL o los UAS (drones), o participante en otro sandbox para probar el nuevo servicio del trafico aéreo.

Pero no solo va a ayudar a desarrollar nuevas tecnologías, sino para demostrar que puede ser seguro volar un helicóptero de extinción de incendios en una operación nocturna.

Uno de los retos que se plantea es que dentro de la aviación es necesario aplicar la normativa sectorial existente, así como los reglamentos comunitarios cuando apliquen de manera imperativa y vinculante para mantener las garantías y los requisitos de seguridad que caracterizan al sector. Es por ello que la autoridad supervisora o la comisión de expertos a la hora de definir el protocolo deben valorar las mitigaciones operacionales como delimitar las zonas donde se va a realizar la prueba o el tiempo de exposición para reducir el riesgo, y de esa manera aliviar los requisitos existentes.

Otro reto que se plantea con el nuevo proyecto de ley, es que sobre el promotor de la prueba recae toda la responsabilidad civil y en la regulación sectorial de aviación (Ley de Navegación Aérea), será el operador que utilice la tecnología, pero en el caso del U-Space, el promotor puede ser el proveedor de servicios y los participantes los operadores de las aeronaves, y en caso de un accidente, el protocolo de ley dice que la responsabilidad es del promotor, pero la Ley de Navegación Aérea dice que es el Operador de la Aeronave, pero en este caso si hubiera una concurrencia de causas debería haber una responsabilidad solidaria entre ellos, para incentivar así a los promotores a que se desarrolle y teste las nuevas tecnologías.

Todas estas preguntas o retos, estamos seguras  que Maria nos va a ayudar a resolverlas con la experiencia y lecciones aprendidas de utilizar los sandbox en UK dentro del sector de la aviación.

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